La refrigeración es un sistema crucial en cualquier automóvil, en el que las bombas de agua juegan un papel clave, ya que son las responsables de que el líquido refrigerante fluya por el circuito. En la actualidad, se pueden encontrar distintos tipos de bombas de agua en el mercado, desde las tradicionales bombas mecánicas hasta el innovador módulo de gestión térmica. Conviene tener en cuenta la importancia que ha adquirido la refrigeración ante el reto de la disminución de emisiones. Un motor que no funciona a la temperatura adecuada es un motor más contaminante, así que es necesario gestionar con eficacia el sistema de refrigeración. En este sentido, innovaciones como el módulo de gestión térmica desarrollado por INA, es capaz de reducir las emisiones nada menos que en un 4%, como veremos más adelante.
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Bombas de agua mecánicas
Aunque este tipo de bombas de agua representa el primer paso en la evolución de este componente, aún siguen presentes en un gran número de vehículos. La velocidad de las bombas de agua mecánicas está directamente vinculada a la velocidad del motor.
Bombas de agua de vacío
Se trata de una bomba accionada por la correa y controlada mediante el principio de vacío. Se activa siguiendo un principio de “encendido-apagado”, de modo que el líquido refrigerante fluye solo cuando es necesario.
Bombas de agua eléctricas
Las bombas de agua eléctricas funcionan, como su nombre indica, mediante el sistema eléctrico de 12 voltios del vehículo y por la correa. Por lo tanto, esta bomba está completamente desvinculada de la velocidad del motor. De este modo, el motor eléctrico es capaz de ajustar la potencia de la bomba en función de las necesidades del sistema.
Módulo de gestión térmica con bomba de agua
El módulo de gestión térmica representa un salto evolutivo de la bomba de agua. Desarrollado por INA, este módulo permite alcanzar y ajustar la temperatura óptima de funcionamiento en un periodo de tiempo muy breve. Es capaz de tener en cuenta el estado de funcionamiento y la situación de conducción, controlando el caudal de refrigerante en los diferentes circuitos del sistema. De este modo, logra aumentar la eficiencia del motor. Como resultado, el consumo y las emisiones de CO2 se reducen hasta en un 4%. Se trata de una innovación disponible en el mercado de la posventa en exclusiva bajo la marca INA.
