Varios modelos de furgoneta del gupo PSA (Citroën Jumper y Peugeot Boxer) o Fiat (Ducato) equipan un sistema de embrague de accionamiento contrario, también denominado de tirar. En estos embragues la horquilla tira del collarín para liberar el disco de embrague en lugar de empujarlo. En los vehículos mencionados, es frecuente que se produzcan retemblores al iniciar la marcha después de un elevado kilometraje. La causa detrás de este síntoma, no está en el volante bimasa, sino en un componente al que hay que prestar atención: la horquilla. En este post de Repxpert, el Blog del Taller Mecánico, te detallamos cómo diagnosticar esta avería. Si quieres saber más, no dejes de leer el post en el que te contamos los consejos más útiles para sustituir un embrague de tirar. Seguimos.
Retemblor al iniciar la marcha

En los modelos de furgoneta que hemos comentado más arriba, se puede producir una falta de progresividad en el accionamiento que se manifiesta con un acople brusco irregular del disco de embrague y en consecuencia, retemblores al iniciar la marcha. Aunque en muchas ocasiones el volante bimasa sea el “sospechoso habitual”, debemos decirte que no es el causante de este fallo, el culpable es la horquilla.
Y es que después de un elevado kilometraje, la horquilla puede presentar un desgaste en las puntas de contacto, un detalle que, a priori, puede parecer poco significativo. Sin embargo, este desgaste es probablemente el causante del retemblor. Como se puede ver en la imagen superior, las puntas de la horquilla han perdido su forma esférica, y muestran una parte de su superficie aplanada por el desgaste, lo que afecta a su funcionalidad y causa el fallo.
Comprobar el desgaste de la horquilla
A la hora de comprobar este tipo de horquillas, debes tener en cuenta que las puntas de contacto con el collarín, que son las que están sometidas a desgaste, están orientadas hacia la caja de cambios, de modo que para comprobar su estado debes emplear un espejo o bien desmontar la horquilla de la propia caja de cambios. Otro punto que debes revisar es que no exista un excesivo juego entre la horquilla y su eje (por ejemplo por desgaste de éste) y que la guía del collarín esté en perfectas condiciones.
Efectos de una horquilla desgastada

Además de los ya citados retemblores (sobretodo en primera y marcha atrás) y la falta de progresividad, el desgaste de la horquilla puede generar otros daños en el embrague. Uno de ellos es la deformación o rotura de la o las patillas del collarín (ver imagen superior), pudiendo provocar incluso el que el collarín se desencaje del plato de presión. Ten en cuenta que si el diafragma se ha girado por exceso de vibraciones y ha tomado contacto con la carcasa del plato de presión (ver imagen inferior), deberás sustituir el conjunto de embrague. Y un último consejo, en ningún caso apliques grasa en el anillo de fijación del collarín.
