La diagnosis de averías de transmisión representa un importante reto para el taller: cada concepto de caja de cambios requiere conocimientos específicos para identificar la causa de una avería, ya se trate de un cambio manual, CVT o un cambio automatizado de embrague doble. Precisamente, en este blog hemos dedicado numerosos contenidos dedicados a este último concepto, que es posible reparar gracias a la solución de mantenimiento LuK RepSet 2CT, tanto en su versión en seco como en la versión húmeda, de reciente lanzamiento.

En este post dirigimos de nuevo nuestra atención al embrague doble húmedo, para contarte, en 5 pasos, cómo llevar a cabo el diagnóstico de daños de este tipo de embrague, centrándonos en aspectos poco usuales pero de gran importancia, como la información facilitada por el cliente. Ten en cuenta que antes de reparar un embrague de este tipo, debes tratar con él ciertas cuestiones fundamentales. De este modo, podrás delimitar el patrón de error con mayor precisión. Además, y si aún es posible conducir el vehículo, te recomendamos llevar a cabo realizar una prueba de conducción con el cliente al volante, para que nos indique los fallos de funcionamiento que haya podido detectar.

1. Preguntas específicas para el cliente
Junto con la prueba de conducción (si es posible realizarla), hay una serie de preguntas que es aconsejable realizar al cliente. Como ya te hemos comentado, este proceso te ayudará a la hora de realizar el diagnóstico de la avería. Estas son algunas preguntas que te proponemos, basándonos en la experiencia de nuestros técnicos y de otros profesionales como tú:
- ¿Qué es lo que no funciona exactamente?
- ¿Cuándo detectó el problema?
- ¿El fallo surgió de repente o bien de forma gradual?
- ¿Cuándo se produce el fallo? ¿Solo en ocasiones, a menudo o siempre?
- ¿En fase de la conducción se encuentra el vehículo cuando surge el fallo? Por ejemplo, ¿al arrancar, acelerar o desacelerar o con el motor en frío o en caliente?
- ¿Qué kilometraje tiene el vehículo?
- ¿Se somete el vehículo a cargas inusuales? P. ej., tirar de un remolque, alta capacidad de carga, frecuentes subidas de pendientes, se usa como taxi, vehículo de una flota, coche de alquiler…?
- ¿Cuál es el perfil de conducción? Por ejemplo, ¿vehículo urbano, trayectos cortos, interurbano, autovía?
- ¿El sistema de embrague y/o transmisión se ha reparado con anterioridad? De ser así, ¿con qué kilometraje? ¿Cuál fue el motivo? ¿Qué reparaciones se efectuaron?
2. Pruebas generales con el vehículo
Ten en cuenta que, aunque no es posible comprobar el desgaste del embrague con una prueba de conducción, la electrónica de la transmisión y del embrague monitorizan el sistema de forma permanente, y cualquier anomalía debería mostrarse en el cuadro de instrumentos. Antes de comenzar a reparar el vehículo, se deben comprobar los puntos siguientes: Entradas de códigos de averías en la unidad de control (motor, transmisión, embrague, confort, bus CAN, etc.) y alimentación de la batería.

3. La inspección visual
La inspección visual también resulta de gran utilidad. Por eso, debería revisarse con detalle la zona del sistema de embrague, en busca de fugas y daños. Las piezas que se hayan roto o las fugas de aceite debidas a retenes o anillos obturadores defectuosos han podido provocar daños que deberían repararse antes de sustituir el embrague.
4. Localiza el ruido
Otro síntoma que se debe tener en cuenta es la presencia de ruidos. Durante la prueba de conducción, debes asegurarte de aislar ruidos de otros sistemas, como el escape, las placas protectoras de calor, los soportes del motor o los equipos auxiliares, entre otros. Además, la radio, el aire acondicionado y la ventilación deben apagarse durante el examen de ruidos. Para localizar la fuente del ruido con mayor precisión, puedes emplear un estetoscopio de taller.
5. Diagnóstico
Para diagnosticar la electrónica de la transmisión y del embrague, debes leer previamente el contenido de la memoria de errores con una herramienta de diagnóstico adecuada y, a ser posible, conservar una copia impresa. El informe de la memoria de errores te ofrece una primera visión general de los fallos del sistema y constituye la base para posteriores medidas de reparación. Además te proporciona los datos necesarios para evaluar el patrón de error (importante a la hora de contactar con el centro de servicios o en caso de reclamación de la garantía). Por último, una vez finalizados todos los trabajos en el embrague doble, recuerda que debes realizar un ajuste básico del sistema de embrague.