El automóvil moderno es fruto de un proceso evolutivo de más de 100 años. Cada vez más eficiente, cómodo y seguro, es capaz de rendir durante varios cientos de miles de kilómetros. La clave para lograrlo pasa por un mantenimiento eficaz, que preste atención a los componentes y sistemas sometidos a desgaste. Ha llegado la hora de elegir los recambios adecuados.
En el proceso de mantenimiento de un vehículo, los profesionales de la reparación son los responsables de prescribir y llevar a cabo un mantenimiento seguro y eficaz. Una tarea que pasa, sin excepción, por la elección de recambios de calidad. Pero, ¿por qué es tan importante? ¿Lo es en todos los casos? ¿Cómo sabemos si estamos eligiendo bien? Vamos a ver los motivos y claves que rigen la búsqueda de los mejores recambios.
¿Por qué es tan importante?
Un automóvil es un sistema complejo compuesto por cerca de 30.000 piezas. Todas ellas han sido creadas y testadas de acuerdo a unos estándares de calidad y están pensadas para trabajar en armonía. Aquellas sometidas a desgaste o averiadas deben ser sustituidas por recambios de la calidad adecuada que, en ocasiones, como sucede con determinadas piezas de suspensión, tienen especificaciones distintas para compensar el desgaste general del vehículo.
Calidad original
A la hora de elegir, la calidad original o también llamada OE (del inglés original equipment) es la elección más segura. Esta indicación se refiere a que la pieza es la misma que equipaba el vehículo en origen, por lo que estamos seguros de que cumplen a la perfección con las especificaciones que espera el constructor del vehículo. Este detalle generalmente basta para saber que hemos elegido la marca y el producto adecuados. Es cierto que hay componentes que pueden superar al original, pero, salvo que sepamos muy bien lo que estamos haciendo, mejor ir sobre seguro y elegir OE.
¿Pero, quién está detrás?
Detrás de un producto OE suele haber una marca de primer nivel, así que esa es la primera pista de que hemos acertado. La marca que hay detrás de nuestros recambios no solo es quién garantiza la calidad del producto, sino también quien va a responder si algo va mal. Por eso debemos elegir una marca conocida que tenga es nuestro país una estructura que nos dé soporte si la cosa se complica.
Servicios: porque no todo es producto
Y es que, cuando empiezan los problemas es cuando las marcas tienen que dar el do de pecho. Por eso hay que apostar por los fabricantes que proporcionan al profesional aquellos servicios que le van a ayudar en su día a día, dotándole de la información que necesita y proporcionándole la asistencia adecuada.
Mejor, soluciones completas
El tiempo es dinero, especialmente en el taller. Por eso, lo adecuado es ir sobre seguro y evitar errores a la hora de hacer una intervención, especialmente cuando esta es compleja. Fabricantes como Schaeffler han creado el concepto de solución de mantenimiento. Colocan todo lo necesario para, por ejemplo, cambiar un embrague o una distribución en una sola caja. De este modo se ahorra tiempo durante el pedido y se eliminan errores al pedir las piezas necesarias.
