Cuatro motores eléctricos, aceleración de 0 a 100 km/h en 2,6 segundos, monocasco de fibra de carbono… No estamos hablando de un súper deportivo italiano o alemán. Se trata del monoplaza que los estudiantes de la Universidad Politécnica de Madrid han creado para competir en la Formula Student 2019.
Esta disciplina, orientada a estudiantes universitarios, representa una oportunidad única de participar en el desarrollo y la construcción de un automóvil de carreras, además de competir con él en diversas pruebas, tanto estáticas como dinámicas, frente a universidades de otros países. Porque el camino hacia el futuro de la movilidad comienza en la etapa formativa. Schaeffler Iberia colabora en esta disciplina en la que miles de estudiantes de todo el mundo compiten desarrollando su propio monoplaza de competición.
El pasado 30 de julio tuvimos la oportunidad de asistir a la presentación del monoplaza de este año. En las instalaciones del INSIA (Instituto Universitario de Investigación del Automóvil), auspiciador de este proyecto desde 2003, nos dimos cita los medios, los patrocinadores y los (MUY) orgullosos familiares de los más de 40 estudiantes que componen el equipo UPM Racing. Futuros ingenieros que juegan a ser mayores con todas las consecuencias, como atestigua el monoplaza de este año, que es recibido con aplausos como el héroe que se va a la guerra. Hoy no podrá rodar por razones de seguridad, pero aseguran que está listo para correr.
Los tests de los próximos días serán cruciales, porque en breve parten para Hockenheim (Alemania), donde participarán en la primera de las dos carreras de Formula Student que permite el presupuesto de este año. La segunda será a finales de mes en Montmeló. Les esperan las exigentes pruebas estáticas, en las que el vehículo debe mostrar que cumple con todos los estándares establecidos y que muchos participantes no logran superar. Después, toca darlo todo en el circuito en pruebas de aceleración, agilidad y resistencia. Para sobresalir en todas ellas, UPM Racing ha optado por un monoplaza lleno de sorpresas.

Una apuesta innovadora
A simple vista parece un pequeño juguete de Hot Wheels, pero el UPM 03E es el indicativo de que los cambios que llegan a la industria también han llegado a las aulas. El coche que va a defender el honor de la facultad madrileña esta temporada en la Formula Student está propulsado por cuatro motores eléctricos, encargados de propulsar sus respectivas ruedas. Toda una apuesta por las nuevas posibilidades que ofrece la movilidad eléctrica. Esta configuración, similar a la que equipan prototipos de Schaeffler como el 4ePerformanceo el Schaeffler Mover, representa varios retos para su óptimo desarrollo.
En primer lugar, la transmisión debe realizar un importante trabajo de desmultiplicación en un espacio muy reducido. Javier del Fresno, uno de los responsables del área de transmisión dentro del equipo, nos explicó que para resolverlo han optado por un compacto diseño de engranajes planetarios, para el que han contado con la aportación de piezas y consejos por parte de los técnicos de Schaeffler. El otro gran reto para convertir al UPM 03E en un caballo ganador es la conocida como vectorización de par, es decir, el ajuste continuo de la potencia de los cuatro motores en función de las necesidades de cada momento de la conducción. De este modo, es posible aprovechar las cualidades dinámicas de esta configuración, logrando un agarre y una respuesta muy superior a un vehículo con un solo propulsor.
Además de estas novedades, tenemos que destacar que se trata del primer monoplaza que el equipo construye con chasis monocasco de fibra de carbono, en detrimento de la tradicional estructura multitubular.

El lado humano
No hay duda de que los dos años de media que los estudiantes participantes pasan asociados a este proyecto tendrán una gran influencia en sus carreras, pero, como resalta Alberto Prada, responsable del área de marketing del equipo (no todo van a ser tornillos), para los estudiantes esta es una gran experiencia personal. Para que este engranaje funcione, los miembros de UPM Racing conviven durante muchas horas, disfrutando en ocasiones, pero también aprendiendo a gestionar situaciones complejas, algo fundamental cuando se trata de trabajar en equipo. Por eso no dudan en disfrutar juntos de cada carrera de Formula 1 o en decidir quiénes serán los pilotos en unas tandas de karting.
Más allá del lado humano, les deseamos a los estudiantes de la Politécnica lo mejor en las dos pruebas que vienen, de las que daremos cuenta en un nuevo post de este blog.
