Schaeffler continúa contribuyendo a la movilidad sostenible con el desarrollo de nuevas tecnologías. Se trata de nuevos componentes y sistemas que formarán parte de los coches del futuro dentro de muy poco tiempo. Este es el caso de los ejes eléctricos, un elemento clave capaz de integrar varios sistemas en un módulo, lo que facilita su integración y producción en serie. Si hasta ahora, los ejes eléctricos de Schaeffler integraban hasta tres componentes de accionamiento en una unidad compacta, el concepto 4 en 1, Schaeffler va ahora un paso más allá: al motor eléctrico, la electrónica de potencia y la transmisión se une ahora el sistema de gestión térmica. Esta novedad permite que el eje de transmisión sea más compacto y ligero y garantiza un mayor confort. Además, gracias a un sistema de gestión térmica particularmente eficiente el automóvil viaja más lejos con una carga de batería y se carga más rápido.
¿Por qué es tan importante el calor en los coches del futuro?

Lo primero que hay que tener en cuenta es que este tipo de vehículos no dispone del calor residual de los motores de combustión interna para, por ejemplo, calentar el interior. Por otra parte, bajo temperaturas exteriores altas y bajas, la autonomía y la capacidad de carga dependen en gran medida de que la batería mantenga una temperatura adecuada. Por tanto, un sistema de gestión térmica tiene una influencia significativa en la eficiencia y la comodidad del vehículo. Además, integrando este sistema en el eje eléctrico se incrementa su eficacia: requiere mucho menos espacio y se pierde menos energía al prescindir de mangueras y cables innecesarios.
Las ventajas del sistema 4 en 1

Este sistema permite la interacción optimizada de los subsistemas individuales y tiene en cuenta el comportamiento térmico de los componentes de accionamiento individuales. Por ejemplo, es capaz de asegurar que el exceso de calor del motor se disipe de manera eficiente y se utilice en el interior del vehículo. Para ello recurre a una bomba de calor que emplea como refrigerante el dióxido de carbono. Este gas no solo tiene menos impacto en el medio ambiente que el refrigerante convencional, sino que también tiene características físicas que permiten calentar y enfriar los vehículos de manera más eficiente. Como resultado, se obtiene un nivel de eficiencia de hasta el 96 por ciento.
Producción mundial

Con su eje eléctrico 4 en 1, Schaeffler está desarrollando su sistema de propulsión para automóviles eléctricos más completo hasta el momento. Se trata de un concepto que se une a un amplio porfolio de componentes y subsistemas individuales en producción en varios lugares del mundo, y que incluye motores eléctricos, transmisiones, rodamientos y sistemas de gestión térmica.
En septiembre de 2021, comenzó la producción en su planta de Szombathely, Hungría, la primera del Grupo Schaeffler dedicada enteramente a la movilidad eléctrica. Una instalación a la que se une la planta de motores eléctricos de Bühl (líder mundial), la de Taicang en China o la de Wooster en EE. UU.